1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Unión Europea: días cruciales para la política monetaria

Brigitte Scholtes
18 de julio de 2022

Queda claro que el Banco Central Europeo subirá las tasas de interés el próximo jueves, por primera vez en años. Lo único incierto es qué tan altas serán.

La presidenta del BCE, Christine Lagarde.
La presidenta del BCE, Christine Lagarde.Imagen: Michael Probst/dpa/AP/picture alliance

Una inflación en la eurozona superior al 8 por ciento, el euro al nivel del dólar y una crisis de gobierno en Italia es el escenario en el que el consejo del Banco Central Europeo (BCE) se reunirá este jueves (21.07.2022) para decidir la futura dirección de la política monetaria.

En la última reunión del consejo, en junio, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, anunció un giro en los tipos de interés, que sería el primero en once años. Después, los tipos de interés básicos subirían inicialmente 25 puntos básicos (un punto básico representa la centésima parte de un punto porcentual), y luego probablemente 50 puntos básicos en septiembre. Para entonces, los tiempos de las tasas de interés negativas habrían terminado. Sin embargo, muchos bancos ya están reaccionando: solo en Alemania, casi 50 bancos ya las  han suprimido por completo, y es probable que otros les sigan en las próximas semanas.

El BCE llega tarde

Pero lo que todos quieren saber es la rapidez con la que el BCE subirá los tipos de interés. "El BCE llega demasiado tarde", afirma Gertrud Traud, economista jefe de Helaba, el banco regional de Hesse-Turingia (Alemania). En vista de la tasa de inflación históricamente alta, que últimamente es del 8,6 por ciento en la zona del euro, Traud califica la situación de "precaria": "En todo el mundo, los bancos centrales ya han subido los tipos de interés, ahora el BCE también debe demostrar que se toma en serio su trabajo y que lucha contra la inflación".

Sede del Banco Central Europeo (BCE), en Fráncfort, Alemania.Imagen: imago images/J.Tack

El ritmo y el alcance de la normalización de la política monetaria son controversiales, hasta en el consejo del BCE. El presidente del Bundesbank, Joachim Nagel, puede, incluso, imaginar subir los tipos de interés clave hasta el rango restrictivo, lo que frenaría activamente la economía. Nagel suele ser uno de los defensores de una política monetaria más estricta, mientras que los partidarios de una postura más laxa advierten sobre los riesgos de una recesión, especialmente por las consecuencias de la guerra en Ucrania.

¿Más de 25 puntos básicos?

Karsten Junius, economista jefe del banco suizo Safra Sarasin, por ejemplo, apuesta por una subida de los tipos de interés de 50 puntos básicos. En la situación actual, según Junius, el BCE no debería centrarse tanto en sus anuncios. Para Traud, incluso si un banco central inicialmente solo da un pequeño paso en las tasas de interés, es importante que los reguladores monetarios dejen claro que están preparados para seguir subiendo los tipos de interés después de septiembre. Y así cumplir con su trabajo, que es mantener la inflación en un nivel del 2 por ciento, para que el valor del euro se mantenga estable.

No obstante, la situación actual no es fácil para los bancos centrales. Por un lado, tienen que normalizar la política monetaria. Pero si pisan el freno demasiado fuerte, ahogan la economía. "De todos modos, no pueden cambiar nada en cuanto a los precios de la energía", explica Martin Lück, economista jefe para Alemania de Blackrock, la mayor gestora de activos del mundo, "por lo que tendrían que bajar los precios de otras cosas, bienes y servicios de esa manera".

Incluso sin la intervención del BCE, los riesgos de recesión aumentan, especialmente si Rusia no vuelve a abrir el grifo del gas el próximo jueves tras los trabajos de mantenimiento del gasoducto Nord Stream 1.  Por lo tanto, según Lück, "normalizar" la política monetaria significa acercarse a la "tasa de interés neutra"; es decir, el tipo de interés al que la economía no se acelera ni se frena. Pero aún es difícil determinar en qué punto se encuentra actualmente dicha tasa de interés en la eurozona. Y, por último, los mercados financieros también miran a Italia. La crisis del gobierno no facilita la situación al BCE. El primer ministro Mario Draghi sigue en el cargo, pero no se sabe cuánto durará. 

(ct/ers)

Ir a la siguiente sección Descubra más