Al menos 300 obreros que se encontraban trabajando en el aeropuerto de San Petersburgo sufren síntomas de intoxicación y están siendo atendidos, indicaron fuentes oficiales. Los trabajadores fueron trasladados en numerosas ambulancias a establecimientos hospitalarios por registrar problemas intestinales y baja presión.

Por el momento se desconoce si los síntomas pueden ser atribuidos a la comida servida en el comedor del aeropuerto o a emanaciones tóxicas. Al menos 13 personas se encuentran en un "estado complicado", señaló el Ministerio del Interior ruso. Los obreros estaban trabajando en la construcción de una terminal aeroportuaria. En San Petersburgo se celebrará el 5 y 6 de septiembre el próximo encuentro del G-20 (dpa)