Las organizaciones internacionales cifran en miles de millones el monto que se requerirá para la reconstrucción de Irak después de la guerra. La pregunta que surge es quién los pagará. Representantes alemanes han criticado la vieja política de que sean los estadounidenses los que atacan, la Organización de las Naciones Unidas la que suministra alimentos a las millones de víctimas desamparadas y la Unión Europea la que financia buena parte de la reconstrucción.

Según informes del Programa de Alimentación Mundial de las Naciones Unidas (WFP), Irak requerirá probablemente la mayor operación humanitaria de la historia para alimentar a su población entera tras la invasión encabezada por Estados Unidos. Se habla de 22 millones de personas. Antes de que comenzara la guerra el WFP alimentaba ya a un 60% de la población iraquí afectada por las sanciones impuestas por la ONU desde la invasión de Kuwait por parte de Irak en 1990.

No a la guerra, sí a la paz

Según expertos economistas la reconstrucción después de finalizar la guerra costará miles de millones de euros, un monto que supera con creces los 75.000 millones de dólares calculados por Estados Unidos. Mientras más se prolongue la guerra y mayor sea la destrucción, mayor será también el monto requerido para levantar al país. O por lo menos tratar de hacerlo, pues los expertos coinciden en que la reconstrucción de Irak se convertirá en un pozo sin fondo y no habrá suficiente dinero para poder subsanar todos los daños causados. Como en guerras previas no se dispondrá del mismo capital para la reconstrucción, es decir para la vida, que de lo dispuesto para la destrucción.

La Unión Europea, está sin embargo, consciente de que aún cuando se puede mantener al margen de los ataques militares no puede hacerlo cuando llegue el momento de darle bases sólidas a la paz. Siguiendo esta lógica, y a pesar de todas la críticas en contra de su participación en momentos en que por lo menos en el caso alemán esto representaría un incremento de su de por sí enrome deuda pública, diversos gobiernos europeos, entre ellos el alemán, han indicado que participará en la reconstrucción.

El debate de la reconstrucción

El canciller alemán, Gerhard Schröder, indicó que Alemania asumirá sus responsabilidades internacionales bajo el auspicio de la ONU. También el presidente francés, Jaques Chirac, ha demandado que sean las Naciones Unidas las que encabecen los esfuerzos para la reconstrucción, cualquiera que sea el resultado del conflicto bélico en Irak. Chirac ha indicado expresamente que se opone a que Estados Unidos y Gran Bretaña obtengan poderes de administración en Irak. Con lo que llegamos a la siguiente manzana de la discordia.

Estados Unidos por lo visto piensa selectivamente sobre la reconstrucción de Irak. De los escasos 75 mil millones de dólares que el presidente estadounidense ha demandado al Congreso de su país como medios adicionales para la guerra, sólo 700 millones - una centésima parte- están programados para la reconstrucción. Aún cuando Estados Unidos prometiera un programa de ayuda masiva pocos días después de iniciada la guerra, ha pasado ya una semana y no se ve la ayuda masiva para el pueblo iraquí. Por otro lado con sorpresa se lee que la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos adjudicó ya el viernes 24 de marzo - incluso antes de que se informara que las fuerzas británicas y norteamericanas tomaron el control de la ciudad - que han pasado a la empresa Stevedoring Services of America un contrato de 4,8 millones de dólares para administrar el puerto iraquí de Um Qasr,.el principal puerto de aguas profundas de Irak.

También se habla ya sobre supuestas licitaciones a empresas estadounidenses para levantar la infraestructura petrolera de Irak. Ahora la lucha será evitar que Irak se convierta en un protectorado de Estados Unidos y para esto Las Naciones Unidas deben lograr un papel central en cualquier labor humanitaria.