Mientras en Alemania se debate sobre la vacunación de menores contra el coronavirus, en otros países su vacunación ya es habitual. Algunos ejemplos.
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La Agencia Europea del Medicamento (EMA) aprobó la vacuna contra el coronavirus de los laboratorios BioNTech/Pfizer para menores a partir de los 12 años a finales de mayo y la de Moderna a finales de julio. Ahora que otros países ya están vacunando a este grupo de edad, los políticos de Alemania presionan para que se inmunice a los niños y adolescentes de forma rápida y completa.
Actualmente, ya es posible vacunar a los jóvenes de 12 a 17 años, pero la Comisión Permanente de Vacunación de Alemania (STIKO) aún no ha emitido una recomendación general de vacunación para este grupo.
La forma en que se gestiona lavacunación de niños y adolescentes varía, pero en muchos países la vacunación de los adolescentes ya está en marcha.
Francia
Francia está vacunando a los jóvenes de 12 a 17 años desde mediados de junio. Casi dos millones de jóvenes de este grupo de edad ya se han vacunado contra el coronavirus al menos una vez. Esto supone el 14% de los menores. Primero solo se utilizaba la vacuna de BioNTech/Pfizer, ahora también la de Moderna. Un requisito previo para la vacunación contra el COVID-19 es que tanto el niño como sus padres estén de acuerdo.
El pasaporte sanitario introducido recientemente en Francia se aplicará también a los jóvenes de 12 a 17 años a partir de finales de septiembre. Es necesario para acceder a museos, piscinas, cines y partidos de fútbol, por ejemplo.
Retroceso en la vacunación infantil
12:38
Estados Unidos
En EE.UU., la vacunación está recomendada desde principios de mayo para todas las personas mayores de 12 años. Sin embargo, solo la vacuna de BioNTech/Pfizer ha sido aprobada para los menores de 18 años. En la actualidad, casi once millones de jóvenes de entre 12 y 17 años han sido vacunados al menos una vez, lo que también corresponde a cerca del 14% de los niños y adolescentes. Unos ocho millones, es decir, el 12%, ya tienen dos dosis. La vacunación de los adolescentes ha sido clave en el avance de la campaña que estaba estancada en Estados Unidos, según análisis de datos del New York Times.
Reino Unido
En el Reino Unido, las vacunas contra el coronavirus han estado disponibles para personas mayores de 18 años. Las únicas excepciones son los niños y adolescentes con comorbilidades. Desde el 19 de julio, la comisión de vacunación JCVI recomienda su vacunación con BioNTech/Pfizer.
Australia
El 23 de julio, la Agencia Reguladora de Medicamentos de Australia (TGA) aprobó de forma urgente la vacuna de BioNTech/Pfizer para niños de 12 a 15 años; anteriormente, la vacuna había sido aprobada para mayores de 16 años. La aprobación para el grupo de edad más joven fue precedida por "una cuidadosa evaluación de los datos de seguridad y eficacia disponibles, incluidos los ensayos clínicos en adolescentes de 12 a 15 años", dijo la TGA. El Grupo Asesor Técnico Australiano sobre Inmunización (ATAGI) recomendó dar prioridad a personas con comorbilidades, indígenas y niños de comunidades remotas.
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Camboya
El objetivo es vacunar a dos millones de personas de entre 12 y 17 años en este país de 17 millones de habitantes hasta noviembre. El Primer Ministro Hun Sen instó a todos los padres a hacer vacunar a sus hijos, afirmando que es la única forma segura de protegerlos de COVID-19 y reducir el número de infecciones y muertes. Los colegios deberían reabrirse tan pronto como finalice la campaña de vacunación, dijo. Actualmente, un 46% de la población ha recibido al menos una dosis.
Israel
Israel amplió su programa de vacunación a los niños de 12 a 16 años en junio pasado. En casos excepcionales, Israel también ha permitido la vacunación de niños a partir de los cinco años desde principios de agosto, si corren un riesgo especial de enfermar gravemente o morir en caso de infección porque padecen problemas cardíacos o pulmonares. Los pequeños reciben 0,1 mililitros de la vacuna de BioNTech/Pfizer, una dosis tres veces menor que la de los adultos.
(jov/er)
Coronavirus: vacunación en lugares remotos e insólitos
Los equipos sanitarios realizan viajes largos, a veces duros, para vacunar a personas en todo el mundo contra el coronavirus, escalando montañas, cruzando ríos, y también caminando muchas horas.
Imagen: Tarso Sarraf/AFP
Escalando hacia los pueblos montañosos
Quien quiera vacunar a la gente en las regiones montañosas del sureste de Turquía debe estar en forma. La vacunación en los pueblos de montaña es particularmente importante, dijo el doctor Zeynep Eralp en una entrevista con DW: "La gente suele convivir muy cerca" y el virus se puede propagar rápidamente. Además, a la gente no le gusta ir a los hospitales, "así que tenemos que acudir a ella".
Imagen: Bulent Kilic/AFP
Vacunación con nieve y frío
La gente muy mayor no van sola al centro de vacunación. En el Valle Maira, en el oeste de los Alpes italianos, muy cerca de la frontera con Francia, los médicos van de casa en casa para vacunar a personas mayores de 80 años contra el coronavirus. Por el camino cuentan con apoyo religioso.
Imagen: Marco Bertorello/AFP
En avioneta al río Yukon
Con su cargamento de vacunas contra el coronavirus, esta enfermera viaja a Eagle en avión. Menos de 100 personas viven en ese lugar al pie del río Yukon, en Alaska, EE. UU. La población indígena tiene preferencia en muchos programas de vacunación, porque vive muy lejos y el próximo centro de salud le queda lejos.
Imagen: Nathan Howard/REUTERS
No solo vacunar sino también convencer
Anselmo Tunubala se lava las manos antes de vacunar a una anciana. Todos los días, este hombre de 49 años anda por las montañas en el suroeste de Colombia para explicarle a la gente en el idioma local lo importante que es la vacunación. Es miembro de los misak, quienes viven allí. Son muy escépticos ante la vacunación, porque confían mucho en la medicina tradicional y sus líderes religiosos.
Imagen: Luis Robayo/AFP
Caminando durante horas para vacunarse
Estos hombres y mujeres caminaron hasta cuatro horas para vacunarse en la remota ciudad de Nueva Colonia, en el centro de México. Pertenecen al pueblo indígena de los wixárika. Internacionalmente son más conocidos con el nombre de huicholes.
Imagen: Ulises Ruiz/AFP/Getty Images
Vacunación en una barca
Olga Pimentel arrimó su bote junto al del equipo de vacunación. Solo se puede llegar a la comunidad de Nossa Senhora Livramento en Río Negro, en Brasil, a través del río. "¡Bien! Apenas dolió", dijo la mujer de 72 años entre risas y gritó: "¡Viva SUS!", el sistema de salud pública de Brasil.
Imagen: Michael Dantas/AFP
Vacunando sin electricidad
Durante mucho tiempo, el presidente populista de derecha Jair Bolsonaro no estuvo a favor de la vacunación contra el coronavirus en Brasil. Los pueblos indígenas y los quilombolas, descendientes de esclavos africanos, fueron de los primeros en ser vacunados. Incluida Raimunda Nonata, de 70 años. Como su comunidad no tiene acceso a la red eléctrica, la vacuna se administró a la luz de las velas.
Imagen: Tarso Sarraf/AFP
Médico en casa en Japón
También en Japón, el médico va a casa a vacunar. Aunque las metrópolis japonesas se encuentran entre las ciudades más grandes del mundo, el país del este asiático también tiene pueblos pequeños y aislados con solo unos pocos cientos de habitantes, como Kitaaiki. Cualquiera que no pueda llegar a la siguiente ciudad más grande, está feliz con la visita de un médico a su hogar.
Imagen: Kazuhiro Nogi/AFP
Vacunas muy valiosas en Indonesia
A principios de enero, en Indonesia también comenzaron a vacunar. En barco, el personal sanitario viajó a islas remotas. Las vacunas en la nevera son tan valiosas que hubo personal de seguridad cuidando las dosis.
Imagen: Chaideer Mahyuddin/AFP
Vacunación como evento de supercotagio
La India es actualmente el país más afectado por la pandemia. A mediados de marzo, trabajadores médicos llegaron a la aldea de Bahakajari, en el río Brahmaputra. Estas mujeres querían registrarse para ser vacunadas. Sin mascarilla, sin distancia de seguridad. Ojalá esta situación no haya provocado más contagios.