Un avión de la aerolínea de bajo coste Ryanair tuvo que aterrizar de emergencia en la noche del viernes en Alemania tras producirse una caída de presión en la cabina. La aeronave había partido de la capital irlandesa de Dublín con destino al balneario croata de Zadar, pero fue desviada al aeropuerto de Hahn, cerca de Fráncfort, al quejarse varios pasajeros "de dolores de cabeza, oídos y de náuseas", informó este sábado (14.07.2018)  la Policía alemana de fronteras.

Tras el aterrizaje, 33 pasajeros fueron llevados al hospital. La nave del tipo Boeing 737-800 transportaba un total de 189 personas. Ryanair comunicó que la tripulación dispuso el uso de máscaras de oxígeno y realizó un descenso controlado del aparato. Enfermeros y médicos atendieron al pasaje a su llegada a Hahn. Los más afectados fueron trasladados al hospital para revisión médica ambulatoria.

La línea aérea envió otra aeronave para completar el vuelo, que partió este mediodía hacia Croacia. Un total de 22 pasajeros prefirieron continuar el viaje en autobús. Aún se desconocen las causas por las cuales se despresurizó la cabina. "Es algo que tendrán que dilucidar los especialistas, pero va a llevar tiempo", dijo un portavoz policial.

Un pasajero del vuelo FR-7312 que cita el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung indicó que hubo un fuerte estruendo en la cabina y que inmediatamente descendió la temperatura. Las máscaras de oxígeno cayeron del techo mientras una voz alertaba que se realizaría un descenso de emergencia. Agregó el pasajero que al principio hubo reacciones de pánico pero que poco después se restableció la calma. Muchos pasajeros se quejaron de dolor de oídos y a algunos les sangraron los oídos. Una mujer fue sacada del avión en camilla.

"La despresurización puede ocurrir, pero en muy pocos casos origina verdaderos problemas", explicó a dpa el portavoz de la asociación de pilotos alemanes Cockpit, Janis Georg Schmitt. En estos casos no hay peligro de que el avión se precipite. Esta situación es entrenada regularmente en los simuladores de vuelo, agregó.

Existen dos tipos de despresurización, abundó Schmitt. Hay una lenta, provocada por ejemplo por un pequeño orificio en las paredes de la cabina o por problemas del sistema de presión que bombea aire a la cabina.  En ocasiones mucho menos frecuentes se puede producir una despresurización rápida, que puede ser ocasionada por hueco más grande en la cabina, la pérdida de una ventana o un problema mayor de las válvulas.

"En este caso se escucha un estruendo y la presión y la temperatura se desploman de un momento a otro". Los pasajeros tienen dolor de oídos e incluso sufren rotura de tímpano. Ryanair se limitó a señalar que el avión había tenido que aterrizar por la caída de presión en la cabina, pero no ofreció detalles sobre las causas ni sobre los inconvenientes sufridos por los pasajeros.

El viernes mismo ocupó los titulares un incidente de despresurización en una aeronave de Air China. En este caso, el copiloto había fumado un cigarrillo electrónico y en el intento de disipar el humo se había equivocado de botones y provocado la caída de presión. (dpa)