Así lo confirmaron este miércoles (18.6.2014) las autoridades del hospital Sani Abach, que dijeron que hubo al menos 21 víctimas mortales y 27 heridos. La bomba fue colocada cerca de un grupo de hinchas en Damaturu, la capital del estado de Yobe, que veían el partido entre Brasil y México. El artefacto estalló poco después de que comenzara el encuentro. La policía indicó que aún es pronto para conocer más detalles.

"Mi hermano vive cerca. Él y su hijo están heridos", dijo Alhaji Ishiaku Yajub, un residente de Damaturu. "Me dijo que llevaron muchos cadáveres a la morgue en el hospital".

Se sospecha de Boko Haram

A pesar de que por el momento nadie asumió el atentado, se sospecha del grupo terrorista islámico Boko Haram, que rechaza toda forma de tipo de vida occidental y considera que el fútbol "no es islámico". Boko Haram pretende imponer un Estado islámico en el norte de de Nigeria. El grupo se atribuyó la autoría de varios atentados extremistas a centrales de Policía, del Ejército y otros organismos estatales, así como a escuelas e iglesias católicas, que dejaron miles de muertos desde 2009.

El secuestro de cerca de 300 muchachas por los islamistas causó la indignación de la comunidad internacional. Aún se desconoce el paradero de 200 de las jóvenes escolares.

Otro atentado del grupo a principios de junio dejó 54 muertos entre personas que veían una emisión deportiva local. A fines de mayo, otro atacante estrelló un vehículo lleno de explosivos contra un grupo de personas que miraban la final de la Liga de Campeones en pantalla gigante y dejó cuatro muertos.

Nigeria disputa el Mundial en el Grupo F, que comparte con Argentina, Bosnia e Irán. Las autoridades temían atentados con motivo de los partidos e instaron a los hinchas a no acudir a las concentraciones públicas para ver partidos de fútbol.

CP (dpa, rtr)