El Vaticano mencionó la necesidad de hacer una "profunda revisión" en la congregación católica La Legión de Cristo, debido a los escándalos sexuales protagonizados por su fundador, el fallecido sacerdote mexicano Marcial Maciel.

En un comunicado emitido tras dos días de reuniones con cinco obispos a cargo de investigar el caso de la Legión, el Vaticano señaló que el papa Benedicto XVI quiere asegurarse de que los miembros de la orden no se queden "solos".

Por ello, agregó la Santa Sede, la Iglesia los acompañará en el "camino de purificación" que deben emprender.

El Papa decidirá "pronto" qué hacer respecto a la congregación, añadió el Vaticano, después de recibir el informe de los cinco obispos encargados de realizar una Visita Apostólica de control a la Legión de Cristo.

Las recomendaciones de los visitadores apuntan entre otros a una revisión de las estructuras de la organización. Maciel, fallecido en 2008, fue acusado durante años de haber abusado de seminaristas menores de edad a su cargo, y tiene al menos tres hijos con dos mujeres.

El Vaticano aprobó la Visita Apostólica para la Legión de Cristo en 2004. Los cinco obispos a cargo se reunieron durante sus investigaciones con más de 1.000 miembros de la orden, especificó hoy el Vaticano.

Numerosos testigos, según el informe, confirmaron la "conducta inmoral" de Maciel, que en muchos casos ponía de manifiesto una "vida sin escrúpulos y sin sentimientos religiosos auténticos".

Maciel renunció a su cargo como líder de la congregación en 2005. Las primeras acusaciones habían sido hechas en 1997, aunque el religioso mexicano siempre las rechazó.

El Vaticano castigó oficialmente a Maciel en 2006. El fundador de la Legión de Cristo se retiró del foco público por orden de Benedicto XVI y llevó a cabo una "vida retirada de oración y de penitencia" hasta su muerte en enero de 2008. dpa