Después de dos semanas sin poder asistir a clases, al menos 300 de los cerca de 2.000 jóvenes que cruzan a diario la frontera entre Venezuela y Colombia pudieron retomar en parte la normalidad, luego de que el gobierno venezolano autorizara la apertura de un corredor humanitario. Gracias a la medida, los estudiantes cruzaron a bordo de autobuses o caminando los puentes Simón Bolívar, que conecta San Antonio con Cúcuta (Colombia), así como el internacional Francisco de Paula Santander que une Ureña con Cúcuta.



La ministra de Educación de Colombia, Gina Parody, estuvo presente en la zona limítrofe para realizar un “minucioso seguimiento al retorno de clases” de los niños y jóvenes, y anunció que todos “tendrán garantizado el servicio de alimentación escolar”. “La educación de los niños debe estar por encima de cualquier interés político, por eso celebramos la apertura de este corredor humanitario que garantizará este derecho fundamental y permitirá contrarrestar el alto ausentismo que se presenta en colegios y universidades de la zona fronteriza”, resaltó Parody.

La decisión de abrir este corredor humanitario fue adoptada poco después de que el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, condicionara un encuentro con su colega Nicolás Maduro a la solución del problema de las clases. El gesto podría propiciar un acercamiento entre las partes, que se ven involucradas en una crisis fronteriza debido a una denuncia venezolana, que asegura que paramilitares colombianos atacaron a soldados del Ejército.

Normalidad a partir del lunes

Santos puso otras dos condiciones para dialogar con Maduro: que se permita a los más de 1.300 colombianos deportados que puedan recuperar los enseres que dejaron en Venezuela por medio de 18 camiones puestos con tal fin por su gobierno, y que las autoridades de ese país “cumplan con los protocolos mínimos y no maltraten a los colombianos que van a ser deportados”. Maduro manifestó estar dispuesto a dialogar, pero advirtió a Santos que el camino de las amenazas no llevará a ningún destino.

En tanto, el alcalde de Cúcuta celebró el paso de los niños a Colombia. “Estos niños venezolanos de padres colombianos primero llegarán a desayunar y retomarán sus clases”, manifestó Donamaris Ramírez a los periodistas. El general Carlos Martínez, autoridad única de la zona fronteriza venezolana, dijo que se espera que el lunes se “normalice completamente” el paso de los estudiantes hacia las escuelas ubicadas al otro lado del límite fronterizo.

DZC (dpa, EFE, Reuters)