"Disponen de 48 horas para salir del territorio de la República Bolivariana de Venezuela debido al discurso y acciones injerencistas de su gobierno", informó la cancillería venezolana en un comunicado al embajador de Panamá, Pedro Roberto Pereira, y a otros tres diplomáticos. La nota le anunciaba también su consideración como persona “non-grata”, después de que ayer el presidente socialista de Venezuela, Nicolás Maduro, rompiera las relaciones diplomáticas entre ambos países por lo que describió como una "conspiración".

Costa Rica asumirá los trámites consulares de Panamá en el país, como dijo hoy la vicecanciller panameña, Mayra Arosemena, en declaraciones a la televisión local TVN (Canal 2). Arosemena confirmó que "se ha iniciado el proceso de despido del personal diplomático y consular" de Panamá en Caracas y que quienes requieran algún trámite deben hacerlo ya en el consulado costarricense.

Sin represalias

Arosemena recomendó a los venezolanos residentes en Panamá que "no se preocupen", debido a que este país no tomará acciones migratorias contra ellos tras la ruptura de relaciones. Venezuela ya rompió relaciones con Panamá en 2004, cuando el entonces presidente venezolano Hugo Chávez reaccionó contra la liberación en este país del anticastrista Luis Posada Carriles, acusado del atentado en el vuelo 455 de Cubana de Aviación en 1976, en el que murieron 73 personas.

Las deterioradas relaciones entre ambos países fueron restauradas durante el gobierno del presidente panameño Martín Torrijos (2004-2009), del socialdemócrata Partido Revolucionario Democrático (PRD). Los diplomáticos expulsados ahora, además del embajador Pereira, son el consejero Jaime Serrano, la agregada diplomática María Salazar y el agregado Raúl Fernando Rolla Font.

Deuda comercial millonaria

El ministro venezolano de Relaciones Exteriores, Elías Jaua, lanzó hoy dudas sobre la legitimidad de una multimillonaria deuda comercial de Venezuela con exportadores panameños a través de una entrevista radiofónica. Jaua afirmó que la relación comercial que mantienen venezolanos con empresarios panameños "se genera dentro de un espacio de corruptela absoluta".

Agregó que la revisión del pago de la deuda quedó suspendida "hasta tanto en Panamá no haya un gobierno serio que respete las relaciones, que deben tenerse de respeto mutuo entre los países". Indicó que con la ruptura de las relaciones se podrá revisar la deuda con más calma, a fin de determinar si es real o fraudulenta.

LGC (dpa, reuters)