Por primera vez desde que comenzaron las protestas en Venezuela, el gobierno ha reconocido que las fuerzas de seguridad han cometido “excesos” contra los manifestantes. La encargada de hacer el mea culpa fue la fiscal general, Luisa Ortega Díaz, quien dijo este domingo (23.03.2014) que en la represión de las protestas contre el régimen de Nicolás Maduro algunos agentes se han excedido.

“Sí, ha habido excesos policiales. Ha habido abusos y se están investigando. Tenemos 60 investigaciones y 15 personas privadas de libertad. Eso indica que hay la intención de castigar esos hechos”, dijo la fiscal en una entrevista. Hasta el momento, las revueltas han dejado cientos de personas heridas y un número oficial de 34 muertos, muchos de ellos en manos de fuerzas irregulares armadas que presuntamente defienden al gobierno.

La fiscal también defendió el accionar de la Guardia Nacional Bolivariana en las protestas, señalando que muchas veces sus agentes han sido víctimas de ataques desmedidos. “Ha habido abusos, pero una de las grandes mentiras es que el Estado venezolano es violador de los derechos humanos”, acotó la autoridad, recordando que en otros períodos de la historia reciente del país hubo desaparecidos y muertos en cámaras de tortura.

Todos presos, dice Capriles

Los opositores -en su mayoría estudiantes- permanecen firmes en las calles reclamando por el alto costo de la vida, la acuciante escasez de bienes básicos y la inseguridad, males de los que culpan a Maduro. En un intento por demonizar las movilizaciones, la televisión estatal muestra a diario imágenes de supuestos estudiantes protestando encapuchados e hiriendo a policías antimotines.

Sin embargo, periodistas de la agencia de noticias Reuters aseguran haber sido testigos de la violencia de algunos manifestantes, así como también de las fuerzas de seguridad que han apuntado sus armas de fuego contra los civiles y golpeado a otros que, en apariencia, estaban desarmados. Hasta ahora, el gobierno de Maduro había negado tajantemente el maltrato, que lleva siendo denunciado por líderes opositores por semanas.

Por su parte, el gobernador de Miranda y excandidato presidencial, Henrique Capriles, señaló este domingo que al gobierno de Maduro no le conviene que se acabe la violencia, pues le sirve para tapar la profunda crisis que vive el país. También criticó las detenciones de líderes opositores y dijo que Maduro va a tener que “meter presos a todos los venezolanos que queremos un cambio en el país”.

DZC (Reuters, Europa Press, El Universal)