Quien crea que Grecia debe ser sacrificada se equivoca, estimó Venizelos, en referencia a declaraciones de políticos alemanes y de otros países que opinan que Atenas tendría que abandonar la moneda común.

"Sería el suicidio de la eurozona", agregó el líder socialista, cuyo partido PASOK forma parte de la coalición de gobierno junto con los conservadores y la izquierda democrática en Grecia.

Nuevas medidas de austeridad

Entretanto, el ministro de Finanzas griego, Giannis Stournaras, presentó este jueves a los expertos de la troika las nuevas medidas de ahorro por 11.500 millones de euros (13.900 millones de dólares) que adoptará el país en los próximos dos años y que se espera afecten sobre todo a los jubilados.

En la reunión, que duró alrededor de dos horas, el ministro intentó convencer a los inspectores de la Unión Europea, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo, que se encuentran en Grecia desde el martes, de que liberen más partidas de rescate a Atenas.

Según adelantó la prensa griega, en el futuro no habrá ya ningún jubilado que cobre más de 2.200 euros. También habrá recortes en el sector sanitario y obligaciones de pagar para quien acuda frecuentemente al médico. Si las visitas al médico superan un valor de 1.500 euros al año, los asegurados tendrán que pagar 10 euros por cada nueva consulta y un 15 por ciento de los costes hospitalarios.

Sin embargo, las medidas no son aún definitivas. Además, tienen que recibir el visto bueno de los acreedores internacionales. Este viernes, Samaras se reunirá con la troika. Del informe que emitan los expertos dependerá que Atenas reciba nuevas ayudas.

Fuente: dpa

Editora: Emilia Rojas