En los últimos días se multiplican los rumores sobre supuestas cárceles clandestinas de la CIA y vuelos secretos vinculados al traslado de prisioneros sospechosos de terrorismo. Dichos vuelos realizados en su mayoría por la noche o madrugada involucran a varios países europeos, desde España hasta Polonia pasando por Islandia. En la red clandestina se encuentran, entre otros, el aeropuerto polaco de Szymany, en el noreste de Polonia, el aeropuerto militar Mihail Kogalniceanu, en Rumania y el de Palma, en Mallorca.

Según medios islandeses, un avión civil supuestamente operado por la CIA aterrizó por lo menos 67 veces sin que las autoridades locales supieran algo al respecto. El gobierno de Reykiavik ha pedido una explicación a Washington . "Si a bordo viajaban prisioneros, el aterrizaje debía contar con aprobación del gobierno", dijo un portavoz del gobierno islandés. Sospechas parecidas se multiplican en el resto de Europa.

Human Rights Watch

La organización estadounidense Human Rights Watch ha puesto sus esperanzas en las investigaciones del Consejo de Europa, que hace unos días nombró al senador suizo, Dick Marty, presidente de la Comisión de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos, y le asignó dirigir las investigaciones. El político helvético anunció posibles resultados a finales de mes.

Se investiga por ejemplo, el papel del aeropuerto de Mallorca como lugar de paso en los vuelos que realiza la CIA tras el 11 de septiembre. Se estima que desde el 2002, ahí hicieron escala más de 1.680 vuelos amparados por el gobierno estadounidense. En muchas de esas escalas se transportaba a prisioneros con destino a Jordania y Egipto en operaciones de entrega extraordinaria, "Extraordinary rendition", como son llamados por el jargón de los servicios secretos.

Amnistía Internacional

"Hace poco entrevistamos a tres ciudadanos Yemeníes que fueron transportados con los ojos vendados, fueron llevados a cuatro distintos países en donde fueron maltratados y torturados", dijo en conversación con DW-WORLD, el portavoz de Amnistía Internacional (AI), James Dyson. "Ni ellos ni nosotros sabemos en que países estuvieron, pero sabemos que las condiciones de su traslado y encarcelamiento fueron ilegales", señala Dyson. Los detenidos no pudieron identificar el lugar en donde estaban pero si el acento estadounidense de quienes los interrogaron.

Los rumores sobre la red de cárceles clandestinas no son ninguna novedad para Amnistía Internacional, la organización no gubernamental realizó el fin de semana una Conferencia Internacional sobre la Tortura en Londres, a la que asistieron especialistas en derecho internacional y ex-detenidos y sus familias. "Escuchamos los testimonios de gente que ha sido detenida en la base militar de Guantánamo y en otras cárceles clandestinas como la de Kandahar, en Afganistán. La tortura de que fueron víctimas fue física y psicológica", afirma.

Fiscalía alemana

El semanario alemán Der Spiegel afirma en un su última edición que indicios sobre supuestos aterrizajes secretos de aviones de la CIA los hay en Holanda, Austria, Italia, Finlandia, Noruega, Suecia e incluso en Alemania. Ni más ni menos que en la base militar estadounidense de Ramstein, a unos 80 kilómetros al sur de Francfort aterrizó en febrero de 2003 un avión Learjet proveniente de Milano. A bordo iba amordazado el Iman Hassan Mustafa Osama Nasr, mejor llamado Abu Omar, quien había sido secuestrado en Milan por agentes secretos que lo llevaron a El Cairo. Desde entonces se desconoce su paradero. La fiscalía italiana ordenó la aprehensión de 13 agentes de la CIA implicados en su secuestro.

La fiscalía de Munich investiga el caso del ciudadano alemán Khaled El Masri, quien al parecer fue secuestrado por error mientras viajaba en un autobús entre la frontera de Kosovo y Macedonia. Estuvo detenido durante unas tres semanas en un hotel en Skopje antes de ser trasladado a Afganistán en donde fue torturado durante cinco meses. Se estima que en aeropuertos como el de Fráncfort, el segundo más grande de Europa, este tipo de operaciones ocurren regularmente.

Los partidos de oposición alemanes demandan al gobierno que aclare con las autoridades estadounidenses los supuestos aterrizajes clandestinos en suelo germano. La vicepresidenta del Partido Demócrata Liberal, FDP, Sabine Leutheusser - Schnarrenberger, exige al entrante titular del Ministerio del Exterior, Frank-Walter Steinmeir, que aclare la situación con el embajador de Estados Unidos en Alemania, pues este tipo de operaciones son una clara violación a la Convención sobre Derechos Humanos.