Washington mantiene la opción militar frente a Pyongyang
16 de septiembre de 2017
Kim Jong-un afirma que su objetivo es igualar la correlación de fuerzas con Estados Unidos para que "no se atrevan a hablar de opción militar". China pide que se dejen a un lado las amenazas y se vuelva al diálogo.
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El líder norcoreano, Kim Jong-un, ordenó personalmente el nuevo test, informó la agencia estatal norcoreano KCNA este sábado (16.09.2017) en un comunicado. En él afirma que no renunciará a su programa armamentístico nuclear. Con este ensayo balístico, se pretende "mitigar la beligerancia de Estados Unidos", señaló la agencia. La meta es llegar a establecer un "equilibrio de fuerzas" entre Corea del Norte y Estados Unidos, para que en este país "no se atrevan a hablar de opción militar", añade el texto.
Estados Unidos, sin embargo, mantiene abierta la posibilidad de una intervención militar en el conflicto. "Existe la opción militar", dijo en Washington el consejero de Seguridad Nacional, Herbert Raymond McMaster. "Ahora, eso no es lo que preferíamos hacer", añadió. En tanto, el Consejo de Seguridad de la ONU, que el lunes resolvió endurecer sus sanciones contra Pyongyang, condenó la reciente "provocación" norcoreana, pero no llegó a ningún acuerdo sobre otras medidas en su sesión de hoy en Nueva York.
En la Casa Blanca, McMaster dijo que Estados Unidos se está acercando al fin de sus posibilidades en cuanto a sanciones y diplomacia. "Este no es un asunto entre Estados Unidos y Corea del Norte. Es un asunto de todo el mundo". El embajador chino ante Naciones Unidas afirmo, en este sentido, que su país estaba preparado para implementar las sanciones aprobadas. "Ni más, ni menos", resumió. El embajador chino en Washington, por su parte, pidió que Estados Unidos se abstenga de hacer más amenazas y que haga más por retomar el diálogo y la negociación. Aunque también afirmó que su país nunca aceptará a Corea del Norte como potencia nuclear.
Kim recalcó que deberían "mostrar con claridad" cómo, "pese a su bloqueo y sanciones ilimitadas", Corea del Norte alcanza el objetivo de completar su fuerza nuclear, que "casi ha terminado". El líder norcoreano hizo un llamamiento a sus científicos para seguir realizando pruebas "significativas y prácticas" en el futuro, y recalcó la "necesidad de correr a toda velocidad y hacia delante", consolidando la capacidad de ataque militar de su país para realizar "un contraataque nuclear a EE.UU. al que no pueda hacer frente".
LGC (dpa/EFE/Reuters)
Estas son las bombas más destructivas del mundo
Estas son las bombas más destructivas del mundo
Imagen: picture-alliance/dpa/US Department of Energy
Robert Oppenheimer, el padre de la bomba atómica
Así considerado por su destacada participación en el Proyecto Manhattan, que desarrolló las primeras armas nucleares de la historia durante la Segunda Guerra Mundial. La primera bomba nuclear fue detonada el 16 de julio de 1945 en la Prueba Trinity, en Nuevo México.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Rooney
"Little boy" es lanzada sobre Hiroshima en agosto de 1945
Las bombas atómicas se fabrican con plutonio o uranio radiactivo y obtienen su fuerza destructiva de la energía que se libera al dividirse el núcleo atómico (fisión nuclear). Este material divisible, al ser expuesto a combustible convencional, queda presionado de tal manera que provoca una reacción en cadena.
Imagen: Imago/United Archives International
Bomba atómica puede matar a cientos de miles
En un segundos, la bomba puede matar a cientos de miles de personas y devastar amplias zonas. A largo plazo la radiactividad también causa graves daños a la salud. En Hirosihima y Nagasaki murieron más de 200.000 personas y 130 mil quedaron heridas. "Me convertí en el destructor del mundo", exclamó Oppenheimer al enterarse. Japoneses conmemoran aquí la matanza que acabó con la II Guerra Mundial.
Imagen: AP
Bomba de uranio
En este caso, a una masa de uranio, llamada "subcrítica", se le añade una cantidad del mismo elemento químico para conseguir una "masa crítica" que comienza a fisionar por sí misma. Otros elementos potencian la creación de neutrones libres, acelerando la reacción en cadena "sostenida", provocando destrucción por la onda de choque mecánica, la onda térmica y la radioactividad.
Imagen: Gemeinfrei
Bomba de hidrógeno o termonuclear
En la imagen vemos a "Ivy Mike", explotada en Nuevo México el 1° de noviembre de 1952. La bomba termonuclear es varias veces más poderosa que las bombas nucleares de Hiroshima y Nagasaki. La bomba de hidrógeno (Bomba H), también llamada térmica de fusión, se basa en la obtención de la energía desprendida al fusionarse dos núcleos atómicos, en lugar de la fisión de los mismos.
Imagen: picture-alliance/dpa/US Department of Energy
Bomba de plutonio, más moderna y complicada
La masa fisionable se rodea de explosivos plásticos, como el RDX, para comprimir el metal, del tamaño de una pelota de tenis al de una canica. Aumentando la densidad el material reacciona en cadena de fisión nuclear descontrolada, provocando la explosión y la destrucción total, contaminando con radioactividad a todo ser vivo alrededor. Aquí vemos la Planta Nuclear Militar de Chongqing, China.
Imagen: picture-alliance/newscom
Bomba de hidrógeno va más allá que la atómica
Un bombardeo de electrones produce la división del núcleo de un átomo y esto produce una reacción en cadena descontrolada. Hasta el momento se trata de una bomba atómica ordinaria. La bomba de hidrógeno va un poco más allá, tiene una segunda etapa. En la imagen la bomba H rusa Zar AN-602.
Imagen: Reuters/M. Zmeyev
Bomba H: dos bombas en una
Después de la fisión del núcleo y la reacción en cadena, el material se dispersa, y esta bomba lo reutiliza, generando una reacción inversa, la fusión. De tal reacción de fusión se desprenden electrones de alta energía que producen nueva reacción en cadena mucho más fuerte. Por esto es que la bomba de hidrógeno es mucho más potente que la atómica. Aquí, la planta de Punggye-ri, Corea del Norte.
Bikini, bombas y un pueblo contaminado
Habitantes de las Islas Marschall protestan aquí por lo que se considera un crimen de lesa humanidad contra la población de los Territorios de Prueba del Océano Pacífico. En Bikini y Rongerik, Estados Unidos ensayó más de 20 bombas de hidrógeno y atómicas entre 1946 y 1958. La población indígena fue expulsada. Los políticos y la radioactividad los desterraron para siempre.