En su último viaje a Bruselas en su cargo de jefe de gobierno, antes del cambio generacional de la cúpula china que se efectuará en octubre, la UE aprovechó la cumbre China-UE celebrada este jueves para despedir a Wen Jiabao con reconocimientos y agradecimientos. Y es que China se ha convertido en la tercera economía del mundo y la Unión Europea es ya el primer mercado de exportación de China.

Wen pidió a los Estados del euro que continúen las reformas estructurales acordadas, en un encuentro con empresarios europeos y chinos en Bruselas.

“China seguirá ayudando”

El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, señaló tras reunirse con Wen que China y la UE trabajan en un acuerdo para proteger las inversiones de empresas europeas, que el año pasado apenas llegaron a los 18.000 millones de euros. "Aquí hay un gran potencial" y lo importante es dar seguridad jurídica a los inversores. "Desde mi punto de vista, éste es el resultado más relevante de esta cumbre", afirmó.

"Europa va por buen camino y esperamos que pronto salga de la crisis financiera", dijo Wen. "Ahora es decisivo que e implanten todas las medidas acortadas. Y los países afectados deben cumplir sus obligaciones y reformas estructurales". Wen recordó que China participa con 43.000 millones de dólares en el capital de garantías del Fondo Monetario Internacional (FMI) para los países del euro. "China seguirá ayudando a solucionar la problemática de deudas de una forma adecuada", aseguró.

Críticas chinas

Por otro lado, Wen aprovechó la cumbre para criticar el embargo de armas que el bloque ha impuesto a su país, y además exigió a Bruselas avances en el reconocimiento de China como economía de mercado. "Llevamos diez años trabajando duramente en ello, pero no se ha logrado ninguna solución", lo lamento profundamente", dijo Wen. A continuación, se cortó la retransmisión en directo por el canal de televisión de la UE. Según un portavoz del Consejo Europeo de ministros, el corte se debió a que la delegación china señaló que esas declaraciones ya no formaban parte del discurso público de apertura. La UE impuso el embargo de armas contra China tras la masacre de Tiananmen, en 1989.

A la prensa no se le permitió acceder a la cumbre, y tampoco hubo rueda de prensa, dado que las autoridades chinas querían restringir el acceso a un número reducido de periodistas. La Comisión Europea sólo puso a disposición de los medios el acto televisado.

Loas a Wen

Al inicio de la reunión, Van Rompuy alabó el mandato del saliente Wen en cuanto a la mejora de las relaciones UE-China en los últimos diez años. "Su papel fue decisivo para que estemos donde estamos", dijo Van Rompuy. China y la UE son más conscientes que nunca de su dependencia mutua. Las relaciones comerciales entre ambos crecieron un 280 por ciento en los últimos diez años. China es el segundo mayor socio comercial de la UE, poco detrás de Estados Unidos. Y para las exportaciones chinas, la UE es el mayor cliente.

Durao Barroso dijo que esta "asociación estratégica" con China se basa en "el respeto, beneficio y amistad mutuos". En sintonía con esa amistad "podemos hablar de todos los temas, de los que estamos de acuerdo y de los que no siempre lo estamos", añadió. Entre estos últimos figura sobre todo la cuestión de los derechos humanos: la UE critica la postura de China con Tíbet y su persecución de opositores.

Fuente: dpa

Editora: Emilia Rojas