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Woody Allen puja por Francia

11 de junio de 2003

El cineasta estadounidense es una de las caras célebres que promocionan a Francia para persuadir a sus compatriotas que visiten ese país.

Woody Allen aborda un tema sensible en los EE.UU.Imagen: AP

La oposición de Francia a la guerra contra Irak no le trajo amigos al otro lado del Atlántico. Todos recordarán que las papas fritas servidas en la cantina del Congreso estadounidense (en inglés las llaman "french fries" o "papas a la francesa"), fueron rebautizadas a "papas de la libertad" ("freedom fries"), para demostrar tanto patriotismo y voluntad de paz universal, como el repudio ante la postura diplomática asumida por París.

Alcanzado a este extremo, ya nadie duda que la crisis iraquí afectó a las relaciones franco-estadounidenses.

Amor por Francia

Alan Stewart Konigsberg, más bien conocido por su alias Woody Allen, es famoso por su amor al país galo. Ahora aparece en un video realizado por el organismo de promoción turística de Francia, en el que pide a Francia y Estados Unidos que olviden sus divergencias.

Sin mencionar explícitamente a la guerra, Allen dice que "recientemente ha habido mucha controversia, pero yo espero que los dos países puedan comenzar a reconstruir lo que ha sido una gran amistad y, esperemos, un gran futuro, y que nadie sea mezquino", comenta Woody Allen en su conocido estilo, entre soñador e improvisado, al ritmo de su particular y sutil tartamudeo.

"Y yo no voy a decir ya 'freedom fries' en lugar de 'french fries' y cuando quiera besar a mi mujer no le daré un ‘freedom kiss’ cuando en si le quiero dar un 'french kiss'", dijo Allen, refiriéndose a la polémica de las papas fritas que tampoco perdonó la forma de referirse a los besos entre enamorados.

Antecedente en Cannes

Woody Allen ya causó titulares cuando desafió un llamado hecho por al comunidad judía estadounidense para boicotear el festival de cine de Cannes hace pocas semanas, que acusaba a los franceses de antisemitas a un grado sólo comparable con lo sufrido durante la Segunda Guerra Mundial.

Por el contrario, Allen destacó durante el célebre festival de cine que la reciente derrota de la extrema derecha en las elecciones demuestra que los franceses no son racistas y que "pueden sentirse orgullosos de cómo respondieron a la extrema derecha en las últimas elecciones".

Amor y divisas

Woody Allen es la primera figura en aparecer en el video de promoción titulado "Volvamos a enamorarnos" ("Let’s Fall in Love Again"), donde además se pueden ver tomas del trompetista de jazz Wynton Marsalis, así como la opinión de un bombero neoyorkino promoviendo Francia.

Pero el amor también se traduce en dinero. Después de todo, el turismo es una de las principales fuentes de ingreso de Francia, el líder mundial como destino turístico. Precisamente en lo que va de año llegaron pocos dólares por este concepto a las cajas registradoras francesas. Según los expertos, el turismo estadounidense a Francia descendió en un 15% en los primeros tres meses del año.

Francia es el principal detsino turístico del mundo.Imagen: Illuscope

Por lo tanto, más allá del amor que Woody Allen le declarea Francia, y los llamados al entendimiento transatlántico que se produzcan, la industria turística está como telón de fondo. La economía francesa, giaul que la de sus vecinos europeos, está pasando un mal momento y necesita divisas para impulsar el Producto Interno Bruto.

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