Xi realiza su primera visita como presidente a Hong Kong
29 de junio de 2017
El mandatario chino prometió trabajar para que la fórmula “un país, dos sistemas” se mantenga durante un “largo tiempo”.
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El presidente de China, Xi Jinping, comenzó este jueves (29.06.2017) su primera visita como mandatario a Hong Kong, en un viaje de tres días cuyo principal objetivo es celebrar el vigésimo aniversario del retorno de la ciudad a soberanía china de manos británicas. Esta fecha se cumple el sábado, para lo cual están preparadas una serie de ceremonias y actos conmemorativos.
"El Gobierno central va a apoyar, como siempre, al desarrollo de Hong Kong y a la mejora de la vida de la población", afirmó Xi en una declaración a la prensa a su llegada al aeropuerto Chek Lap Kok de Hong Kong, una ciudad que está profundamente dividida entre las autoridades, que responden al gobierno central chino, y una parte de la ciudadanía, que exige más libertades, democracia plena e incluso la independencia.
Xi pretende ocupar el viaje como una oportunidad para acercar posiciones, y prometió trabajar para que la fórmula "un país, dos sistemas" que permite a Hong Kong disfrutar de libertades y derechos especiales, se mantenga "estable y por un largo tiempo". En una muestra de sus intenciones, dijo ante los medios que en esta estancia de 72 horas espera generar "más confianza en el desarrollo y construcción de Hong Kong”.
Medidas de seguridad
"Después de nueve años estoy de nuevo pisando suelo hongkonés. Me siento muy feliz. Hong Kong ha tenido siempre un lugar en mi corazón”, dijo Xi, que asumió su puesto en 2013. Poco antes de su arribo, una serie de prominentes opositores fueron detenidos, y permanecen bajo arresto. Las fuertes medidas de seguridad adoptadas para la ocasión muestran que las autoridades temían que se produjeran protestas contra el ilustre visitante.
Entre los detenidos se encuentran el líder opositor Joshua Wong y el joven legislador Nathan Law. "Lo que quieren evitar es que gente como ellos salga a las calles”, dijo el activista Derek Lam. Las banderas rojas de Hong Kong y de China adornaban ordenadas las calles por donde la comitiva de Xi transitaría, en una puesta en escena que también incluía infranqueables barreras y el cierre de numerosas avenidas en toda la ciudad.
DZC (EFE, AFP, dpa)
China y Hong Kong: un país, dos estados de ánimo (nov. 2014)
En China se celebra y se protesta. En algunos lugares se muestra unidad y fuerza, y en otros, divisiones y ansias de libertad. En el Día Nacional de China, resalta el contraste entre Hong Kong y el resto del país.
Imagen: Reuters/Carlos Barria
Ceremonias patrióticas
El 1º de octubre de 1949, Mao Zedong declaró el nacimiento de la República Popular China. Desde entonces, los chinos celebran esa fecha con ceremonias patrióticas, como aquí, izando la bandera en Hefei, en la provincia de Anhui.
Imagen: Reuters
Protestas en Hong Kong
Pero mientras China celebra, la situación en Hong Kong sigue siendo tensa. También en el Día Nacional, miles de personas salieron a la calle. Exigen que se dé marcha atrás con la polémica reforma electoral y rechazan una mayor injerencia de Pekín.
Imagen: Reuters/Carlos Barria
Brindis controvertido
También en Hong Kong hubo ceremonias oficiales conmemorando el Día Nacional. Leung Chun-ying, el controvertido jefe de gobierno de Hong Kong (en el centro), brindó con champán con sus invitados y cantó el himno nacional chino. Los fuegos artificiales, usuales en este día, fueron cancelados.
Imagen: Reuters/Bobby Yip
Piden renuncia del jefe de gobierno
Tradicionalmente, también en la metrópoli portuaria asiática se izaron las banderas de China y de Hong Kong. El líder estudiantil Joshua Wong y otros activistas protestaron dándole la espalda a la ceremonia y sosteniendo las manos cruzadas sobre la cabeza. El movimiento de protesta pide la renuncia de Leung Chun-ying, en quien ven un símbolo de la influencia de Pekín.
Imagen: Reuters
Demostración de fuerza militar
En la capital china, el Partido Comunista hace una demostración de poder. Con pompa militar, una unidad de élite del Ejército Popular Chino porta la bandera roja por la Plaza de la Puerta de la Paz Celestial, o Tiananmen, completamente acordonada. Las celebraciones se llevan a cabo de acuerdo a un estricto ritual.
Imagen: ChinaFotoPress via Getty Images
Resistencia estudiantil
Los manifestantes volvieron a reunirse ya en la víspera del 1º de octubre. Muchos están cansados por las largas noches de protestas, y la lluvia no facilita la situación. Sin embargo, están decididos a seguir protestando hasta haber logrado que se cumplan sus demandas.
Imagen: Reuters/Carlos Barria
Caos organizado
El contraste no podía ser mayor: miles de manifestantes paralizan el tránsito con una sentada en esta concurrida calle de compras del centro de Hong Kong, en el barrio de Mongkok. Y se prevé la afluencia de más manifestantes, ya que en Hong Kong el 1 y el 2 de octubre son días feriados.
Imagen: Reuters/Tyrone Siu
Júbilo en China
En el resto de China no se percibe mucho de las protestas en Hong Kong. Las autoridades censuran todas las noticias y borran los comentarios en las redes sociales. Según expertos, los censores trabajan ahora mucho más que el 4 de junio, cuando se conmemoró el 25 aniversario de la masacre de Tiananmen.
Imagen: picture alliance/ZUMA Press
Rechazo masivo
A la represión y la censura en China se contraponen la libertad de prensa y de opinión en Hong Kong, pero muchos manifestantes ven la amenaza de una mayor injerencia de Pekín. Por ello se han colocado una mascarilla para demostrar que no van a aceptar que se les prohíba decir lo que piensan.
Imagen: AFP/Getty Images/Philippe Lopez
¿Diálogo o represión?
Xi Jinping reaccionó con cautela a las protestas en Hong Kong. En la foto, el presidente chino durante las ceremonias conmemorando el Día Nacional de China, en 2013. Xi Jinping está en un dilema: ¿reprimir o abrir el diálogo? Parece probable que haya enviado a un mediador a Hong Kong para elaborar una solución al conflicto.
Imagen: Reuters
¿Más protestas en Hong Kong?
Los estudiantes siguen manifestándose en las calles. Le pusieron un ultimátum al gobierno de Hong Kong. Quieren que renuncie el jefe de gobierno y que se dé marcha atrás en la reforma electoral. De lo contrario, amenazan con ampliar las protestas, con huelgas y con la ocupación del edificio del gobierno.